FIU recibe recursos para ampliar pruebas con prótesis de mano
Hace tres años la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) aprobó realizar la primera prueba en humanos de una prótesis de mano que estimula el sistema nervioso, un método pionero de la Universidad Internacional de Florida (FIU). Ahora se ampliarán los estudios con el respaldo de $6 millones otorgados por el Departamento de Defensa.
Los recursos financieros fueron dados a Ranu Jung, profesora de ingeniería biomédica de la FIU, y a su equipo “Adaptive Neural Systems Laboratory”, quienes desarrollaron la prótesis de mano que permite a los amputados, veteranos y otras personas, “sentir” nuevamente el tacto.
El sistema llamado NEPH restaura una sensación de fuerza de contacto, agarre y apertura de la mano al estimular las fibras nerviosas sensoriales en la extremidad amputada con alambres finos implantados dentro de los nervios.
Los sensores dispuestos en la prótesis envían señales de forma inalámbrica para el estimulador implantado, que luego provoca sensación mediante electrodos. Como resultado, la persona debe ser capaz de sentir su mano en la posición de apertura y luego los elementos del agarre, cuando la prótesis toma un objeto.
Con este sistema, las personas podrían agarrar objetos delicados como una galleta o un huevo.
“Aunque los avances en prótesis han permitido a los veteranos y miembros del servicio de los Estados Unidos vivir una vida más cómoda, muchos todavía están insatisfechos con sus prótesis y dejan de usarlas”, dijo Jung, decana del Departamento de Ingeniería Biomédica.
Explicó que desarrollaron el NEPH para mejorar la calidad de vida de las personas con amputación de miembros superiores, muchos de los cuales sirvieron en el ejército y espera que esta tecnología les permita realizar tareas diarias y, tal vez algún día, “incluso actividades relacionadas con el servicio militar “.
La primera persona en recibir la prótesis lo ha estado utilizando durante más de 18 meses y el implante fue realizado por el cirujano de manos y nervios periféricos Aaron Berger y su equipo del Nicklaus Children’s Hospital. Berger, que también continuará en el proyecto.
El inicio del ensayo clínico fue posible con el apoyo del programa HAPTIX de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés), y la Oficina de Investigación del ejército.
“El trabajo pionero y el enfoque innovador de Jung en el programa HAPTIX ha resultado en nuestro primer estudio a largo plazo de una prótesis sensorizada. Comprender cómo un sujeto utiliza la retroalimentación sensorial a través de un dispositivo protésico en su propio entorno natural es el siguiente paso importante hacia la ingeniería de un sistema para uso clínico prolongado”, dijo Al Emondi, gerente del programa en la Oficina de Tecnologías Biológicas de DARPA.
El sistema fue desarrollado con el apoyo de una subvención de Bioengineering Research Partnership del Instituto Nacional de Imagen Biomédica y Bioingeniería (NIBIB) y el Instituto Nacional Eunice Kennedy Shriver de Salud Infantil y Desarrollo Humano (NICHD) de los Institutos Nacionales de Salud.
El apoyo reciente de una subvención de NIBIB permitirá la continuación del ensayo clínico inicial con participantes adicionales.
“El apoyo desde hace mucho tiempo de NIBIB a la innovadora tecnología NEPH de FIU ha ayudado a devolver el tacto sensible y la comprensión a los amputados de mano. Estamos entusiasmados de ver que la doctora Jung ahora ha ampliado los fondos del DOD para validar esta tecnología innovadora en una población con necesidades ocupacionales críticas”, dijo Michael Wolfson, director del programa de dispositivos médicos terapéuticos en NIBIB.
El Programa de Investigación Médica Conjunta Warfighter apoyará la expansión del estudio para incluir a la Universidad de Servicios Uniformados / Centro Médico Nacional Militar Walter Reed, así como mejorar las capacidades del sistema.
El nuevo sistema estará diseñado para permitir el uso de diferentes manos protésicas y será adecuado para personas con amputaciones de ambas extremidades superiores.
“Si bien estamos entusiasmados con el impacto potencial de la retroalimentación sensorial en la vida de alguien que tiene una amputación de una mano, esperamos que el impacto sea mucho mayor para alguien con amputación de ambas manos”, dijo James Abbas de la Escuela de Ingeniería de Sistemas Biológicos y de Salud en la Universidad Estatal de Arizona, quien ha sido un socio clave en el desarrollo y evaluación del sistema NEPH.
Cada participante se someterá a una cirugía para implantar componentes del sistema NEPH y se le colocarán componentes externos. Luego participarán en una serie de pruebas durante un período de dos años para determinar la seguridad y la eficacia del sistema.
Fuente: NUEVO HERALD